jueves, 20 de enero de 2011

Fallos


Primer intento: No se esmeró lo suficiente, se apoyó en su trayectoria y se dejó mecer por ella. Falló.
Segundo intento: Decidió esmerarse más pero su intento fallido ya formaba parte de su trayectoria, volvió a fallar por falta de fe.
Tercer intento: Dos meses después, digeridos los intentos fallidos, se hizo la luz, finalmente entendió las razones de sus fallos. Sólo entonces ganó. Ella, con el pelo alborotado, lo miró a los ojos y sonrió feliz, por fin se sentía comprendida.

3 comentarios:

Dean dijo...

A la tercera va la vencida.
Un saludo.

alma dijo...

No es fácil a veces, digerir...

Precioso, como siempre.

Besos Andrea.

Mixha Zizek dijo...

A veces uno le da miles de veces hasta que va, a veces nunca puede llegar... y si que entiendo esto, me encantó, besos