Se detuvo, me esperó.
No supe decidir.
No quise.
Aborté aquel momento
de mi confuso cerebro.
Me marché.
Anduve y anduve.
Ante un semáforo en rojo,
conseguí disfrutar por fin
de mi nuevo chip.
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2 comentarios:
A veces se cruzan caminos con el nuestro... Y aunque por momentos coincidan, cada uno tiene su propio destino...
Andando y andando. En eso consiste esto que llaman vida. Encantado.
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