sábado, 17 de noviembre de 2012

Ofrenda


Agradezco el empeño
del destino, sabe
alejarme de vergüenzas
ajenas como nadie.
Susurra que debo dirigir mi
mirada hacia otro lado,
despedirme rauda
de la contaminación.
Entonces mimo mi
fragilidad para ofrecerla
virgen a una mirada
que aún no llega.
Ya no la espero, más
la aguardo a mi manera.
Sabrá llegar.
Se presentará dispuesta
a rasgar el extraño
envoltorio que la naturaleza
me obligó a vestir.
Llegará a casa,
se reconocerá en mí,
y se quedará.

domingo, 4 de noviembre de 2012

Será

Sólo debía mantener su mente en blanco. Existía una vida que vivir, para qué seguir torturándose. Cuando observaba la miseria ajena tomaba secreta conciencia de su fortuna, pero sólo un rato, desafortunadamente el cansino inconformismo y ella solían ir de la mano. Decidió creer con firmeza que todo había sido producto de su frondosa e inquieta imaginación, o sea, que nunca fue lo que pareció ser. Esperaría con serenidad el momento oportuno, aquel en el que por fin lo que parece ser, es.  

viernes, 2 de noviembre de 2012

Vacío

Un muro,
hay temor, te defiendes.
Lo siento, no fue mi intención.
Ansío acercarme pero no,
volverías a huír.
Lo deseas también,
pero no verás opción.
Siempre el miedo y la huída
absurda, infantil.
Llega el cansancio,
no hay nada ya.
Persecuciones sin sentido,
eres víctima y yo libertad.
Siente, déjalo salir,
no permitas que te asfixie.
Si pudiese llegar a ti
a mi manera, volvería a intentarlo.
Porque una vez lo vi,
pequeño, escondido,
tímido pero lo vi.
El cariño casi estaba fuera,
el afecto se palpaba.
Lástima,
has vuelto a encerrarlos.
Lo siento por ti.