(Doce años)
- Mamá, adónde vamos?
- Al hospital a ver a tu padre.
- Pero..
- Escucha, debes estar preparada, no lo verás como siempre, tu padre ha sufrido un ataque y ha tenido consecuencias, te pido por favor que lo saludes con cariño, te acercarás y le darás dos besos, cuéntale como te ha ido en el colegio.
......
- Mamá, ese no es papá, no puede andar, tiene la boca torcida, no sabe hablar, quiero irme a casa, no me acercaré, déjame en paz.
- Acércate ¿No ves que te está llamando?
- ¡No! No lo haré, déjame en paz y vete a la mierda. (me voy corriendo).
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Llegar a Buenos Aires con 30 años, después de haber vivido en pareja durante ocho años en Madrid fue un poco fuerte, pero mi madre y mis hermanos se encargaron de ofrecerme todos los mimos que necesitaba, me sentía algo frágil. Decidí tomarme un descanso y disfrutar de mi recién estrenada soltería, nada de hombres por un tiempo, me dedicaría a trabajar y a integrarme nuevamente en la sociedad porteña. Tres meses después ya estaba totalmente integrada gracias a mis amistades, que siempre me encargué de mantener a pesar de la distancia. Recibir invitaciones cada noche (bendita frivolidad, que llega cuando más la necesitas), fiestas super divertidas organizadas por mis amigas azafatas de vuelo, salir cuando me daba la gana, volver a cualquier hora. La verdad es que disfruté mucho de esa etapa, vivir sola me encantaba. No dejaba de conocer gente y bueno, ligar nunca se me dio mal pero no porque me lo propusiera, las oportunidades simplemente aparecían, como aquel traumatólogo tan simpático con el que empecé a salir, una especie de amigovio, descartado completamente el día que sugirió con cierta prepotencia que usara falda y tacones. O aquel empresario quince años mayor (parecía mi padre, la verdad) pero poseedor de un estupendísimo barco que era mi perdición, qué atardeceres más increíbles en el río, qué noches de luna llena más impresionantes a bordo, llegábamos hasta Colonia (Uruguay) y hacíamos noche allí. En fin, que me lo estaba pasando estupendamente, no necesitaba compromisos de ningún tipo, sólo trabajar y disfrutar ¿Para qué más? Hasta que...
28 comentarios:
Espero que no te traumatice de mayor esa reacción de tu infancia. Es lo malo de recordar.
Celebro que descubrieras a esa edad las bonanzas de vivir solo. Es cuando más se disfrutan, hasta que...
Un beso,
Fenomenal! hasta que, supongo, conociste otro hombre...??? Saludos!
Jodiaaaaaaaaaaa hasta que ¿que? eres como un culebrón....en lo mejor nos dejas, al menos no hay anuncios en el medio.
Vivir, eso es lo que creo has hecho y es lo mejor de la vida, vivirla. Un besote wapa
Que historia, hasta que? bueno espero el capitulo siguiente siempre con ganas de disfrutar tus post, pues eso lo espero y a continuar disfrutando tus hermosos escritos..
un gusto y placer leerte. saludos fraternos con el cariño de siempre..
un abrazo inmenso
besos
Madre mía, siempre te leo con el corazón en un puño..........
Me encanta.
Interesante soltería e interesada tú por lo del barquito.
Un abrazo
Tu sí que sabes disfrutar!
Mañana vuelvo.
Hola Tito. Te sorprendería la fortaleza que puede tener un ser humano, lo de mi niñez no ha sido nada comparado con algunas otras cosas que la vida me ha puesto delante. Traumas ya no, ya puedo recordar sin sufrir. Y si, siempre hay un 'hasta que'.. verdad? Un beso!
Hola moderato.. je. No te adelantaré nada, un beso, gracias por la visita!
jaja Santi!!(calle) Culebrón yo? noooo. Espera y verás.. Espero que te guste lo que falta. Un abrazo!!
Gracias Adolfo, un abrazo enorme para ti. Me alegran mucho tus visitas.
Gracias Menda, me alegra que te guste, pobre corazón. Un beso!
Hola Ulises, mmm, dejaré pasar tu comentario, no me gustaría pensar que eres de los que pre-juzgan, o sacan conclusiones apresuradas. Pero por si acaso te aclaro que si hay algo que no soy y nunca he sido en la vida es interesada. Claro que me gustaba el barco, y también su dueño, era una persona encantadora. Nada más. Un saludo.
Hola Francisco, en ese momento he disfrutado bastante, es verdad, un beso!
Me alegro con la intensidad que vives cada momento...
Te felicito por tu fortaleza, y poder de decisión.
Un abrazo... y espero! ;-)
Ali
Solo pasé para saludarte, cuando pueda pasaré a leerte y ponerme al día, ya que de apoco voy mejorando mi salud, besos!
Sorry Andrea, era una broma. No prejuzgo a nadie, y menos a los que tienen una vida tan interesante.
Vale ulises, no te preocupes, el malentendido queda aclarado. Amigos y vecinos. Un beso!
Alí, un beso enorme. Gracias por tus palabras.
Kuo, me alegra que estés mejor, un beso guapa!
DEJO ESTOS VERSOS
PARA TI...
Aun si la lluvia, moja tu rostro inerte
Aun si el cielo nublado, no te deja ver el sol
Si tu triste corazón, desea llorar por dentro
Jamás pierdas el aliento, que sonreír es mejor
Sonríe aun si la hierba, no te deja ver las flores
Sonríe si los colores, se te suelen opacar
Aun si se crece el mar, y las olas se asen altas
Que al amanecer mañana, calmado el mar estará.
Aun cuando el viento sople, y se vuelva tempestuoso
Sonríe para que el gozo te sostenga la razón
Y en tu noble corazón, habrá un motivo precioso
Pues dios en su amor hermoso fue quien te hizo y formo
Sonríe que la sonrisa
Ahuyenta el dolor de alma, y nos devuelve la calma
para el camino seguir
Sonríe que sonreír
Es el don más apreciado, para un corazón golpeado
Que necesita vivir.
Sonríe que después de la tormenta siempre sale el arco iris.
NUNCA DEJES DE SONREIR
FELIZ FIN DE SEMANA
UN BESO INMENSO DESDE MI LUNITA
LuNa
¡Sigue, anda!
Me he quedado con los ojos pegados al texto.. :)
Un saludo
Gracias Luna por tus versos, eres muy dulce. Un abrazo enorme guapa.
Hola Ni del viento! gracias por animarme a continuar, un beso y bienvenida. Te sigo.
(Bendita frivolidad que llega cuando más la necesitas) Yo quiero la miaaaaaaaaaaaaaaa!
jaja,coco!, siento que no tengas la tuya..pero no desesperes, siempre hay esperanza. Un beso!!
si es real,
que placer seguir tu vida.
saludos
Gracias alfredo, un placer que la sigas.
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